Cómo meditar: guía práctica para principiantes para establecer tu rutina de meditación en español.
La meditación es una práctica milenaria que sigue muy viva en el mundo actual. Millones de personas la utilizan para encontrar la paz interior, reducir el estrés, mejorar la concentración, potenciar la creatividad e incluso alcanzar la iluminación espiritual. En los últimos años, la popularidad de la meditación se ha disparado y cada vez son más las personas que buscan formas de aprender a meditar y establecer una práctica regular.
Esta guía está diseñada para dotar a los recién llegados a la práctica de la meditación de habla hispana de los conocimientos necesarios para comenzar una práctica meditativa satisfactoria. Lo repasaremos todo, desde cómo empezar hasta cómo establecer tu rutina de meditación en español.
1. Prepárate para la Meditación
El primer paso en cualquier rutina de meditación con éxito es prepararse mental y físicamente. Antes de empezar, busca un lugar cómodo y tranquilo donde no te molesten. Puede ser tu dormitorio, el porche, un parque o cualquier otro lugar en el que te sientas relajado y tranquilo.
Asegúrate de retirar cualquier dispositivo electrónico que pueda distraerte, como televisores, teléfonos o tabletas, y apaga cualquier ruido externo, como la música o la radio. Ahora, es el momento de adoptar tu postura de meditación.
2. Establece tu postura de meditación
La postura correcta para meditar es la llamada postura de Buda Vairochana, que consta de siete puntos: Piernas cruzadas (o pies en el suelo si estás sentado en una silla). Espalda erguida. Manos sobre el regazo o sobre los muslos. Hombros ligeramente girados hacia atrás, abriendo el pecho.
Esta postura te ayudará a centrarte en la respiración, e inhalar y exhalar conscientemente. Sin embargo, hay otras posturas sentadas que puedes utilizar si la postura con las piernas cruzadas no te resulta adecuada. Por ejemplo, puedes sentarte en una silla con los pies apoyados en el suelo y las manos sobre los muslos. Sea cual sea la postura que elijas, asegúrate de que es cómoda, para que puedas meditar sentado durante un rato.
3. Practica la meditación sentada diaria
Parte del establecimiento de una práctica de regular incluye la meditación sentada diaria. Esta es la piedra angular de cualquier práctica meditativa exitosa. La meditación sentada nos permite familiarizarnos con el funcionamiento natural de la mente, de modo que podamos observar nuestros pensamientos, sentimientos y emociones a medida que aparecen y desaparecen.
Cuando se trata de meditación sentada, la actitud lo es todo. En lugar de añadir otra tarea a tu lista, decide que vas a dedicar tiempo a sentarte. Deja a un lado cualquier expectativa o idea preconcebida de «cómo se supone que debe ser la meditación» y hazle un hueco en tu vida.
4. Consejos para establecer una práctica regular
Hacer que la meditación forme parte de tu rutina diaria es clave para establecer una práctica regular. He aquí algunos consejos para empezar:
Empieza poco a poco: Empieza meditando solo cinco minutos al día, dos veces por semana. Aumenta gradualmente la duración y la frecuencia de tus meditaciones hasta que alcances una práctica regular cómoda.
Vincula tu meditación a una tarea rutinaria: Considera la posibilidad de vincular tu meditación a una tarea automática, que no requiera fuerza de voluntad. Podría ser lavarte los dientes por la mañana, ducharte por la noche o pasear al perro.
Experimenta sus beneficios: Se ha demostrado que la meditación reduce los niveles de estrés y aumenta la atención. En un estudio publicado en Psiconeuroendocrinología, los participantes que meditaron solo 25 minutos al día durante tres días consiguieron reducir sus niveles de estrés.
Conclusión
Con esto terminamos nuestra guía sobre cómo meditar para principiantes en español. Esperamos que te lleves conocimientos sobre cómo prepararte para meditar, establecer tu postura de meditación, practicar diariamente la meditación sentada y consejos para establecer una práctica regular. Meditar puede ser una herramienta poderosa para reducir los niveles de estrés y cultivar una mayor sensación de paz y calma interior. Así que, ¡sal ahí fuera y comienza tu propio viaje!